Hace unos meses el gobierno de Estonia nos sorprendía a todos con la idea de la «nacionalidad digital». Básicamente la idea era que el país se declaraba dispuesto a acoger a toda persona con un proyecto web que quisiera utilizar el dominio .ee del país.
Sin embargo, parece que han echado la marcha atrás. El holandés residente en Estonia Otto De Vogd ha sido recientemente denunciado por «vender bitcoins sin licencia». Algo sorprendente ya que la propia administración Estona ni considera bitcoin en su legislación ni suministra las licencias que al parecer luego exige.
Otto ha sido obligado a volver a su Holanda natal para evitar el acoso de la administración estona, que le exige el pago de multas millonarias junto a 3 años de prisión, por vender unas bitcoins por valor de unos 500 euros.
Actualmente está buscando financiación para luchar en los tribunales por su inocencia, asi que si podéis contribuir y véis que esto es una injusticia, podéis contactarle aquí.